Aquí estoy otra vez después de un par de semanas de parón. El caos de la vida se juntó con las vacaciones, que como siempre fueron geniales y demasiado cortas. Estuvimos en Francia, en la zona de Burdeos y nos encantó! Por supuesto, no faltó un poco mucho de turismo telar jaja, a Ribi lo van a hacer santo por su infinita paciencia.
Lo más divertido fue practicar mi francés casi nulo. No saber a qué hora del día se pasa del bonjour al bonsoir, que el tío del camping se ría en tu cara cada vez que le pides une baguette, saber decir "bonjour, je ne parle pas français et je ne compren pas, mais je voudrais cette jolie tissu ici s'il vous plait", pero después tener que comprar deux metres porque no sé decir metro y medio jaja. En fin que lo pasamos bien. Y se me fue la olla de mala manera, y me traje todoooo esto! Oh la la! La mayoría son del mercadillo de Burdeos, a 2 euros el metro, y otras de las muchas tiendas que visitamos. Repito, a mi marido lo hacen santo. Ahora de vuelta en casa y juntándolo todo me doy cuenta de lo loca que estoy jaja... Y encontré los dos últimos números de La Maison Victor! Me muero de ganas de probar algunos patrones, el diseño de la revista enamora!
Y ahora volviendo a la tierra. A la rutina. Y a la costura. Hoy voy a enseñaros mi Cooper Backpack.
Hace ya semanas que terminé esta mochila, y se ha recorrido ya casi medio mundo, exagerando un poco, claro está. Qué más quisiera yo que poderme recorrer medio mundo o ya puestos el mundo entero!
Aquí una pequeña prueba de su recorrido:
En la costa de Tamarit, Tarragona.
En Girona, durante la fiesta de las flores.
En la Bahía de Arcachon, Francia, esperando el barco para regresar y con las pantorrillas achicharradas.
Tomando un café en Balaguer.
Otra vez en Francia, subiéndome a una bici después de casi 20 años, y donde me achicharré las pantorrillas jaja.
Y cerquita de casa, worn by the man. Nos gusta a los dos y se ha convertido en nuestra mochila compartida, o sea que le puedo enchufar el bolso siempre que quiera porque no le da vergüenza llevarlo :-P.
Y ahora pasemos a los detalles.
Patrón
Cooper de Colette Patterns. Instrucciones súper claras y, aunque algo laborioso, no fue nada difícil.
La tela blanca y negra es de
Les Toiles du Soleil y la compré en Francia hace tiempo en la tienda de su fábrica. Nada, solo un par de horas en coche para llegar solo para comprar telas. Tengo que repetir la santidad de mi chico? Son telas caras, pero me dí el capricho porque yo lo valgo :-D.
Las asas son recicladas de una mochila vieja de mi hermana.
La tela negra es una loneta que creo compré en Ikea hace siglos.
Y también reciclé unos vaqueros viejos para las tiras de delante y un par de sitios más.
Es super espaciosa y muy cómoda de llevar. Aunque no acerté con los imanes, no tienen suficiente fuerza y se abre demasiado fácil, lo que combinado con que no tiene cremallera ni nada, no es muy seguro. Pero qué más da jaja... Para la próxima me lo voy a pensar bien para que cierre mejor.
No se aprecia mucho, pero la parte de abajo son tres bolsillos. De nuevo, nada seguros, pero útiles para meter cosas de fácil acceso y de poco valor jaja.
Y por dentro, más tela de Ikea, esos bichos me encantan!
Y eso es todo por hoy! Tengo que ponerme al día con las entradas y los saraos, porque al final se me van a caducar en el tintero!
Patrón:
Cooper de Colette Patterns